LOS ROMPETECHO

Por: Ps. Manuel Cuevas 

En estos días se ha estado publicitando una canción titulada "ROMPE EL TECHO" basada en el pasaje de Lucas 5:17-26, y pensando en esta canción y este pasaje, quiero compartir contigo amado lector algunos apartes de este pasaje y algunas enseñanzas del mismo.

17 En cierta ocasión, Jesús estaba enseñando en una casa. Allí estaban sentados algunos fariseos y algunos maestros de la Ley. Habían venido de todos los pueblos de Galilea, de Judea, y de la ciudad de Jerusalén, para oír a Jesús.

Y como Jesús tenía el poder de Dios para sanar enfermos, 18 llegaron unas personas con una camilla, en la que llevaban a un hombre que no podía caminar. Querían poner al enfermo delante de Jesús, 19 pero no podían entrar en la casa porque en la entrada había mucha gente. Entonces subieron al techo y abrieron allí un agujero. Por ese agujero bajaron al enfermo en la camilla, hasta ponerlo en medio de la gente, delante de Jesús.

20 Cuando Jesús vio la gran confianza que aquellos hombres tenían en él, le dijo al enfermo: «¡Amigo, te perdono tus pecados!»

21 Los maestros de la Ley y los fariseos pensaron: «¿Y éste quién se cree que es? ¡Qué barbaridades dice contra Dios! ¡Sólo Dios puede perdonar pecados!»

22 Jesús se dio cuenta de lo que estaban pensando, y les preguntó: «¿Por qué piensan así? 23 Díganme: ¿qué es más fácil? ¿Perdonar a este enfermo, o sanarlo? 24 Pues voy a demostrarles que yo, el Hijo del hombre, tengo autoridad aquí en la tierra para perdonar pecados.»

Entonces le dijo al hombre que no podía caminar: «Levántate, toma tu camilla y vete a tu casa.»

25 En ese mismo instante, y ante la mirada de todos, el hombre se levantó, tomó la camilla y se fue a su casa alabando a Dios.

26 Todos quedaron admirados y llenos de temor, y comenzaron a alabar a Dios diciendo: «¡Qué cosas tan maravillosas hemos visto hoy!»

Lucas 5:17-26 

 

El Circulo

Jesús se encontraba compartiendo una enseñanza, en una casa ubicada en la región de galilea. La palabra galilea procede de la raíz hebrea galil, una palabra única para "distrito", y en ocasiones para "círculo". En pocas palabras Jesús abrió su circulo intimo (Gentil) para dejar entrar algunas personas los cuales los encerré en 3 grupos:

 

1) Los profesionales de la biblia

En este grupo se encuentran los fariseos y los escribas o doctores de la ley, estos 2 grupos de personas en esa ocasión entraron al circulo donde Jesús compartía una enseñanza; pero su presencia allí no fue para aprender de Jesús, no fue para recibir lo que Jesús tenia para darles, su presencia allí era para criticar y señalar. Su presencia era para encontrar algo con que acusarle; pero en esta ocasión el control del circulo lo tenia Jesús, ya que por ser su región jugaba de local. Los fariseos y escribas no sentían amor, ni compasión por las personas que allí se encontraban. 

“Cuando más se juzga, menos se ama.” 

Honoré de Balzac

2) Los VIP y la multitud

En este grupo se encuentran los discípulos y la multitud, estos 2 grupos de personas en esa ocasión entraron al circulo donde Jesús compartía una enseñanza; pero pudieron haber estado hay por las siguientes motivaciones: por curiosidad, por chisme o simplemente por recibir un milagro. Su actitud de apatía e indiferencia hacia los demás, no muestra su egoísmo. Por otro lado están los discípulos, los cuales caminaban con Jesús, pero ellos sentían que eran parte de un grupo especial selecto (VIP). Ellos no tuvieron la empatía o la efecto de ponerse en el lugar del paralitico, ellos nunca debieron permitir que el techo de esa vivienda fuera dañado, más bien se convirtieron en un obstáculo para que este hombre pudiera ingresar al circulo (Intimo). El evangelista Mike France cita lo siguiente:

Debemos ser pescadores de hombres, no guardianes del acuario.

Mike France

3) Los rompe techo

En este grupo se encuentra el paralitico y sus amigos (Los rompe techo), ellos en esa ocasión entraron al circulo donde Jesús compartía una enseñanza; pero para hacerle una petición a Jesús. Su actitud de fe impacto la vida de Jesús, tanto fue así que su amigo obtuvo el milagro. No les importo romper un techo para llevar acabo su objetivo, el cual era la sanidad de su amigo.

Nadie muestra más amor que quien da la vida por sus amigos.

Jesús de Nazareth

Amado lector es tiempo de que podamos ser de rompe techos para el perdido, el necesitado, el despreciado, aquel que esta postrado en cama por una condición física, espiritual o mental, tu tienes el poder para vencer los obstáculos que se presenten en el camino y llevar a estas personas a los pies de Jesús a través de la fe. Dejemos el egoísmo y la apatía, seamos misericordiosos y bondadosos con el perdido. Tu eres el portador de la buena noticia de salvación, no nos detengamos avancemos y no importa si en el camino nos toca romper algunos techos. 

Vuélvete un rompe techo. Bendiciones.


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